William Hill y Estados Unidos están siendo dos de los grandes protagonistas de los últimos tiempos en el sector del juego y apuestas deportivas. La nación americana lo es porque sus Estados están regulando paulatinamente el sector, con lo cual se abre un nuevo y suculento mercado. Y William Hill está en boca de todos porque es una de las compañías europeas que mejor se está posicionando en este mercado.
La compañía británica fue la primera casa de apuestas en ofrecer sus servicios en Nueva Jersey y, desde entonces, ha seguido sumando socios en Norteamérica. Primero fue el acuerdo con Penn National Gaming, luego, con el gigante de los casinos Eldorado. Además, es una de las pocas casas de apuestas que ofrecen sus servicios en EE.UU a través de dispositivos móviles.
Ante esta situación, los inversores de la compañía en renovado sus esperanzas en un futuro brillante, después de una época en la que William Hill se había sometido a una importante reestructuración de sus objetivos. La apuesta por el mercado americano es fuerte y parece que, de momento, le está saliendo muy bien. No en vano, las acciones de la compañía han subido un 6,6%, lo que refleja la confianza de los inversores en el nuevo rumbo de William Hill.
Todavía es muy pronto para valorar la situación del sector de las apuestas deportivas en Estados Unidos. Lo que es seguro es que es un mercado con un gran número de potenciales clientes, y que William Hill lo está haciendo muy bien para tener una posición privilegiada.
