William Hill está llevando a cabo importantes cambios en su estrategia presencial y online. Una evolución que viene marcada por las nuevas obligaciones legislativas en el Reino Unido, y la necesidad de aprovechar las oportunidades que ofrecen nuevos mercados, en especial el norteamericano.
Hace unos días informábamos de que William Hill calculaba una caída aproximada de sus ingresos del 15% en 2018. Un descenso que ha venido motivado, principalmente, por la amenaza de la nueva normativa británica de limitar las apuestas máximas en las terminales presenciales.
Así, la casa de apuestas británica no está teniendo más remedio que reinventarse. A la marcha de Itai Hadas se suma la llegada de Patrick Jonker como director online internacional. Los principales esfuerzos en este sentido se centrarán en el floreciente mercado de Estados Unidos, donde William Hill está llegando a importantes acuerdos en Estados como Nevada o Nueva Jersey.
Pero, sin duda, una de las medidas más drásticas que tendrá que tomar William Hill será cerrar alrededor de 900 locales de apuestas en el Reino Unido. La más que posible entrada en vigor de la apuestas mínima de 2 euros podría suponer un golpe duro al juego presencial en el Reino Unido, por lo que William Hill piensa tomar medidas urgentes.
Nuevos horizontes se abren para William Hill, una compañía en plena renovación. ¿Conseguirá repuntar el vuelo el gigante de las apuestas?
