Con el fin de incrementar las ganancias fiscales, el vice-primer ministro portugués, Paulo Portas, anunció en rueda de prensa que el país europeo pretende legalizar el juego online en un corto plazo. La noticia formó parte de una serie de medidas económicas que Portugal proyecta para llevar a cabo próximamente.
Como primera acción, antes de fin de año se conformará un grupo de personas que tendrá el propósito de debatir y discutir con relación a las implementaciones y los pasos a seguir para darle vida al mercado del juego online con éxito. Una de las tareas será la de confeccionar las normas y las bases estructurales correspondientes.
Veamos dos puntos importantes del comunicado emitido por el Gobierno de Portugal al respecto:
• Sin perjuicio de lo expuesto, pronto se llegó a la conclusión de que el volumen de juego ilegal en línea en Portugal no será superior a 40 millones de euros al año, sobre lo cual no se podrá aplicar una tasa superior al 20% (bajo pena de replicar los casos de fracaso de los países que lo han probado). Ahora resulta evidente que la receta fiscal no tendrá especial relevancia, y también se debe aplicar una vigilancia sobre los medios y el mercado.
• La legalización del juego online obligará al sistema bancario a equiparse de las herramientas suficientes para controlar y supervisar el sistema de pago, incluida la facultad de bloquear los pagos a entidades que actúan fuera de la ley. Habrá por lo tanto, necesidad de dotar al Banco de Portugal del poder de fiscalización, así como capacitar a diversas instituciones bancarias con el fin de dar cumplimiento a las decisiones de la autoridad de control.
