Sigue el culebrón para la adquisición de Sportium. La empresa española es propiedad al 50% de Cirsa y Ladbrokes. Sin embargo, ambas compañías han decidido recurrir al Tribunal de arbitraje para que se les reconozca el derecho a adquirir el 50% que posee su, hasta ahora, socio.
El caso se extiende desde julio de 2018, cuando Cirsa denunció ante la Corte de Arbitraje del Ilustre Colegio de Abogados de Madrid que los términos de su acuerdo de joint venture con Ladbrokes habían cambiado. La razón es que Ladbrokes fue comprada en 2018 por GVC Holdings lo que, según Cirsa, modifica las condiciones del acuerdo, además de ser un rival directo.
Ante la reclamación, GVC Holdings contraatacó con la misma argumentación, ya que Cirsa también había cambiado de manos. En este caso, la empresa que fuera propiedad de Manuel Lao pasaba a formar parte de Blackstone.
Ahora, Cirsa ha presentado su petición para que se le permita comprar las acciones de Ladbrokes a un precio justo. Lo hizo el pasado 29 de marzo, por lo que GVC dispone hasta el 3 de junio para presentar su contraoferta.
Cabe destacar que este enfrentamiento en la cúpula de Sportium no ha afectado al rendimiento de la compañía, que ha logrado un EBITDA positivo de 9 millones de euros. Además, el hecho de que ambos socios hayan recurrido a un tribunal de arbitraje (y no a la justicia ordinaria) refleja que la relación entre ambos accionistas no es tan tensa como en otros casos.
