Sucedió en la República Checa y Eslovaquia, donde 18 futbolistas fueron arrestados (entre un país y otro) a partir de una investigación realizada a nivel internacional por apuestas deportivas ilegales y amaño de partidos de fútbol. De los detenidos, 12 lo hacen en el fútbol checo y seis en el eslovaco.
Desde la Policía de Eslovaquia informaron que cuatro de los jugadores investigados de dicho país forman parte del plantel del Dunajská Streda, que participa en la Superliga de Eslovaquia (la máxima categoría). En ese sentido, se sabe que uno de los futbolistas admitió su responsabilidad y colaboró la averiguación que llevan a cabo las autoridades. Por ese motivo, habría recuperado su libertad.
Se estima que, por cada juego arreglado, los deportistas involucrados habrían embolsado entre 2 mil y 6 mil euros. Sin embargo, el club Dunajská Streda se desligó absolutamente de la cuestión a través de un comunicado en el que manifestó que conoció la información por intermedio de la Policía.
Además de las detenciones, la Policía había interrogado a otros 20 jugadores y efectuado allanamientos en aproximadamente 15 propiedades. Con respecto a los detenidos, sus nombres no fueron revelados hasta el momento. Algunos juegan en la Primera División de la República Checa y otros en ligas de menor importancia.
Según las indagaciones policiales, mínimamente habrían sido manipulados unos 19 partidos, en una situación que parece no tener fin en el fútbol a nivel mundial. Se presume que la base de esta red de apuestas ilegales estaría en un país de Asia.