Es sabido dentro del sector que la casa de apuestas Paf es especial. Sin lugar a dudas, es una de la compañías que más cuidan a sus clientes y que se toman más en serio la responsabilidad social. Y de hecho, no paran de introducir nuevas iniciativas que así lo demuestran.
Recientemente, Paf decidió establecer un límite a las pérdidas que sus clientes podrían tener durante un año. Ese límite se estableció en 30.000 euros, con el objetivo de que nadie viese demasiado afectada su economía personal por culpa del juego o las apuestas. Paf se convirtió así en la única casa de apuesta del mundo que ponía este tipo de límites a sus jugadores.
Sin embargo, ahora han ido un poco más allá y han vuelto a rebajar esta cantidad. A partir del 1 de enero de 2020, la cantidad máxima de dinero que los jugadores de Paf pueden perder en un año baja a 25.000 euros. A partir de dicha cantidad, se les suspenderá la cuenta y no podrán seguir jugando.
Tal y como ha señalado Christer Fahlstedt, CEO de Paf, la iniciativa tiene un objetivo económico y social. Según Fahlstedt, Paf había prometido que “ninguno de nuestros jugadores debería perder su casa, por lo que impusimos un límite de pérdida de 30.0000 euros. Ahora hemos decidido fortalecer esa promesa para el próximo año reduciendo nuestro límite máximo a 25,000 euros“. Es decir, se rebaja el máximo de pérdidas alrededor de 400 euros al mes.
Este tipo de iniciativas no son nuevas en Paf, una compañía que cuida a sus clientes e incluso les aporta soporte psicológico profesional para tratar la adicción al juego. También hay que tener en cuenta que se trata de una empresa sin ánimo de lucro, que todos sus beneficios los destina a mejorar las condiciones de vida de la región de Aland, donde tiene su sede.
